domingo, 13 de febrero de 2011

MI PEOR MAESTRA

Mi peor maestra la conocí al cursar décimo grado en la clase de lenguaje, su actitud frente a nosotros hacia que cada vez más, los estudiantes convirtieran su clase en un juego. No tenía ninguna metodología  y nunca preparaba sus clases, no incentivada al alumno al cuestionamiento y a la investigación y al ser cuestionada evadía las preguntas diciendo­ ­“eso  ya lo debieron haber visto “.
No fomentaba el respeto y tenía la costumbre de comparar y estigmatizar entre malos y buenos a sus estudiantes, haciéndoles burlas y llevándolos a la mediocridad.
 No era capaz de reconocer sus equivocaciones y al confrontarla siempre quería hacer  ver que el alumno, era el que no quería aprender. No se daba al dialogo ni a a la búsqueda  de soluciones. Por esto pienso que no fue  una buena maestra, porque al no tener interés por que sus estudiantes aprendan y al no querer ayudar a aquellos que se les dificulta su materia, si no por el contrario los olvida, demuestra su falta de vocación.